Durante enero y febrero Amapola estuvo en plena actividad. Mucha gente trabajó día y noche (literalmente) en todo lo que proyectamos para tener la escuela que soñamos y así recibir a los chicos y chicas el primer día de clase con las aulas listas, las novedades a punto, las sorpresas develándose y todo el gran equipo con los brazos abiertos en una esperada bienvenida.
Renovamos los espacios con nuevos colores, ventanas que dejan entrar más luz, proyectores y pantallas que nos permiten el buen uso de nuevas tecnologías, espacios de encuentro, nuevos pisos, muebles, murales inspiradores. Ponemos cada día todo el amor y la energía mejorando nuestros edificios para que sea un lugar cada vez mejor donde estar juntos, para aprender, jugar, soñar, construir, trabajar en equipo, conocernos mejor y desarrollar la mejor versión de cada uno y cada una junto a otros, con quienes compartimos el tiempo escolar que son las raíces que nos acompañan para siempre.
Los espacios enseñan, y su cuidado y lo que vivimos en las salas del jardín y en las aulas de la primaria es lo que aplicamos luego en la vida.
Queremos darles un enormes ¡Gracias! a todos los que lo hicieron posible, en estos largos días calurosos de Buenos Aires.
Hacemos el gran abrazo de equipo antes de salir a la cancha con todos los que somos Amapola: los que hicieron la búsqueda y acompañan en el proceso de las y los que se suman a trabajar con nosotros, los que reciben a las nuevas familias, los que cuidan las finanzas para que todo llegue a tiempo, el equipo de administración y maestranza que están preparando todo con tanto amor que emociona, con los socios fundadores que siguen acompañándonos en cada paso que damos, con el gran equipo de directores que estimulan y cuidan a sus equipos, con las secretarias pedagógicas que están en todos los detalles, con los asesores que nos guían y muy especialmente a las y los docentes que están ahí donde todo esto toma sentido. En el aula, honrando la pasión por la educación y construyendo cada día el futuro.
Ahora si: estamos listo para la bienvenida. Chicos y chicas: ¡adelante!